Yo he tenido la suerte de asistir al banquete y la posterior fiesta de una boda en el Westin Palace (Madrid) en dos ocasiones. No sé si merecerá la pena económicamente hablando, pero desde luego que calidad no le falta.
El Palace siempre ha tenido éxito desde que empezó, y según se puede leer en su web, están en innovación y renovación constante de todos sus productos y servicios.
Son unos auténticos especialistas de la perfección y controlan todos los elementos: florales, vajilla, música ambiental, impresiones personalizadas de la carta de menú… Dejan todo a tu gusto y ofrecen toda la ayuda posible si fuese necesaria.
Cuentan con un prestigioso Chef, que ante todo destaca por la calidad del alimento. Están atentos a las nuevas tendencias de gastronomía en lo bueno y en lo malo. La comida está buenísima y la presentación es muy moderna, pero en mi opinión se quedan cortos de cantidad. Habrá quien prefiera un filete bien grande en el bar de debajo de tu casa por 10 euros o el que prefiera el «filetito de pato» del Palace de bastantes más euros (esto es una crítica constructiva).
Tienen más de 467 habitaciones de lujo y 50 de ellas suites. Las habitaciones son preciosas y tienen mini-bar, televisión y muchas más cosas. Era divertido andar por los pasillos del Palace cual noble caballero.
Desde luego lo mejor de la noche por encima del banquete y las habitaciones fue la fiesta con barra libre. Aquí tengo que poner otro fallo, y es que casi no nos llegaban las bandejas de comida (y claro, barra libre de 9 horas sin comer es una pasada). El alcohol eso sí, de calidad excelente, y los camareros muy atentos.
El Hotel ofrece hasta 2 plazas para el parking por ser el día de la Boda y una tarifa especial para los invitados.