Como ya hemos visto las facilidades que nos da Internet y las diferentes firmas a la hora de elaborar nuestra lista personalizada de regalos, vamos ahora con algunas reglas de oro para nuestra lista de bodas:
1. Espíritu práctico. No nos pongamos a poner en la lista cosas raras. Vamos a poner lo que realmente necesitamos, lo que nos costaría conseguir por nuestros propios medios o simplemente algo que sea práctico para nosotros. Podemos encargar un nuevo microondas, no es que no podamos adquirirlo nosotros, pero nos ahorramos el viaje y es algo que usaremos toda la vida.
2. Presupuestos. Evidentemente todos nuestros comensales no son millonarios, así que en la lista pondremos variedad de precios en cuanto a los regalos. No todos van a ser de 100 o 200 euros.
3. Algún capricho sí. En cambio, aunque hagamos la lista de forma variada en cuanto a los precios, pues podemos poner un buen regalo para los invitados con más pasta, y si cuela, cuela. Si deseamos un nuevo ordenador o una pantalla de televisión gigante, es el momento.
4. Sé ambiciosa. Hay que poner más regalos que invitados. Si lo pusiésemos justo, pues el último invitado está obligado a comprar el último regalo que quede (e imaginaos que lío sería si queda la pantalla del televisor y el familiar que peor va de dinero).
5. Educación. No nos olvidemos nunca de dar las gracias. Deberíamos ir mandando mensajes personales según los regalos los vamos viendo.
6. Sentido del humor. Habrá personas que pasen de la lista de la boda y nos traigan un regalo horrible que no tenga nada que ver con lo que queríamos. Pues a sonreír y agradecer, que para eso estamos.
Pues eso es todo, al final todo el dinero que nos costará la boda, se verá recompensado con el maravilloso día que nos brindan los invitados, más los regalos que nos brinden.