¡Cómo me gusta la lencería fina! Yo creo que unos camisones tan preciosos no están hechos así para dormir precisamente… Están hechos con tanto mimo y tan al detalle porque cada centímetro es visto y acariciado por el novio a menos de dos centímetros de distancia.
Por este motivo no debes pasar por alto comprarte un camisón realmente precioso y de lujo. La noche de bodas tienes que prepararla como si de una princesa te trataras. Elige sedas y delicados encajes, no te mereces menos y él tampoco, piensa que parte del encanto de los regalos está en el envoltorio.
Por supuesto el novio también tiene que cuidar con lo que se pone. Hablaremos más adelante de esto mismo.