Ahorrar en una boda es posible, lo único que necesitarás es dedicar más tiempo a los preparativos. Saca tu lado más creativo, con eso y ganas, serás capaz de elaborar gran parte de la decoración de tu boda e incluso las invitaciones y pequeños detalles.
Vayamos por partes. Unas invitaciones originales y baratas son posibles, apúntate a la nueva moda de invitaciones vía mail, de esta manera ahorrarás tiempo y dinero. Si por el contrario quieres tener invitaciones impresas, crea un diseño o pide a algún conocido que lo haga e imprímelas en casa, puedes comprar en cualquier papelería algún papel bonito que te guste.
En cuanto a la decoración, en muchos restaurantes dentro del presupuesto ya entra la decoración, seguro que si hablas con ellos podréis llegar a un acuerdo y conseguirás aportar tus ideas para que los centros se ajusten a tus gustos. En cuanto a la iglesia. Infórmate, si el restaurante tiene capilla o zona para ceremonias esa será la opción más económica, además ahorrarás el desplazamiento de los invitados. Si por el contrario la boda se celebra en una iglesia con unos cuantos metros de tul y unas margaritas tú misma podrás adornar los bancos y hacer unos centros para el altar. En la mayoría de las iglesias hay restricciones con respecto a la decoración, así que tampoco necesitáis demasiadas flores.
El vídeo y las fotos, es lo más complicado de todo, pero seguro que algún amigo te hará el favor de encargarse de esa tarea durante la boda. Y si no, siempre puedes contratar a un fotógrafo por horas que no esté durante todo el día, al menos así tendréis fotos de la iglesia y después podréis recopilar las fotos de los invitados a lo largo de la comida y la fiesta.
En cuanto al vestido, una muy buena opción es acudir a los outlet o tiendas de alquiler. Las opciones para novios y novias son innumerables, no te desanimes, seguro que podrás encontrar un vestido que se ajuste a tus gustos, y los más importante, a tu presupuesto.
Aunque no nos engañemos, el secreto de un buen ahorro está en el número de invitados, ajusta tu lista al máximo, siempre puedes reunirte otro día con todos tus amigos y conocidos y hacer una gran comida en el campo, es una opción divertida y económica que todos agradecerán.