Como ya sabreis el hijo pequeño de Isabel Preysler y Julio Iglesias se ha casado con su novia, desde hace ocho años, Charise Verhaert. Sin duda se trata de una de las bodas de ensueño y más románticas que he visto nunca.
El escenario, en el Palacio El Rincón, propiedad del marqués de Griñón, padre de Tamara, no cabe duda es el más romántico de todos. Y la novia, acorde con este romántico lugar, eligió un vestido único y muy especial, que a continuación pasamos a describir.
Se trataba de un increíble e impresionante diseño de Manuel Mota para Pronovias en línea evasé con escote en «V». Se componía de un «fourreau» de encaje de Chantilly sobre el que llevaba una falda de talle imperio con bordado artesanal en cristal con motivos de hojas y guirnaldas. La sobrefalda, en maravilloso encaje, llevaba guirnaldas ascendentes.
El look nupcial lo completaba con un impresionante velo de cuatro metros en tul de seda rematado a mano con el mismo encaje del vestido.
Ante semejante creación nupcial, la novia no quiso recargar el look y por eso eligió como complementos joyas unos preciosos pendientes de Suárez de oro blanco con diamantes en talla pera.
En cuanto al peinado, Charisse optó por llevarlo suelto, con raya al lado y unas ligeras y leves ondas.
Es también de destacar en esta boda el impresionante look que lució Isabel Preysler, madrina del evento. También diseño de Manuel Mota, en exclusiva para ella. Se trataba de una creación en «chiffon» de seda natural de color «royal blue» y bordado con «paillettes» de cristal francés con motivbos inspirados en las ramas de coral. La falda «fourreau» de tres capas y bajo evasé, acababa con un pequeño arrastre en la parte posterior.
El cuerpo estaba ablusado, con escote barco, y el bordado estaba realizado artesanalmente, concentrando las ramas de coral en el hombro derecho y en la cadera izquierda, buscando un efecto de contraste, pero armoniosos y elegante.
A este look lo acompañó con un sofisticado recogido y unos pendientes de oro blanco y diamantes con orla de brillantes de la casa Suárez y un precioso brazalete de eslabones de oro blanco con brillantes.