A pesar de que sean los novios los más implicados en la boda y los que más estrés sufren con los preparativos, los invitados también tiene que ponerse a punto para estar perfectos el día de la boda, sentirse bien y poder disfrutar con ellos. En este post os traemos algunas consideraciones importantes a tener en cuenta para la elección de nuestro vestido.
1- Momento del día: Si es por el día lo ideal es llevar algún vestido corto, de color claro, tonos pastel o tierra, incluso con estampados, si se realiza al aire libre. Lo ideal, sobretodo si hace buen tiempo es llevar un vestido corto, con vuelo, y algún bolero si pensamos que hará un poco de frío. Las bodas diurnas son ideales para llevar tocados, pamelas, etc. Si por el contrario la boda es por el día, lo más adecuado es un vestido largo, o bien un vestido hasta las rodillas pero más ajustado que si fuera por la mañana, los colores pueden ir desde los más oscuros y clásicos como el negro, hasta los brillantes, lentejuelas, pedrería, etc.
2- Accesorios: Con respecto a los accesorios es necesario seguir la regla de oro, de menos es más, si nuestro vestido ya es muy recargado lo ideal es que los accesorios, sobretodo las joyas sean discretas. Igualmente los colores más llamativos mejor dejarlos para noche, y evitar los colores blanco, y gamas de blanco como champán, o beige, y negro, sólo permitido si es por la noche.