Si la inauguración de la Barcelona Bridal Fashion Week corrió a cargo de la fantástica diseñadora Rosa Clará, el broche de la Pasarela Gaudí Novias no fue para menos. Un broche de oro fue el que ofreció Pronovias.
Las novias cosmopolitas, clásicas y sofisticadas flotaban por la pasarela envueltas en tejidos vaporosos, como las transparencias de encajes, las gasas y las organzas plisadas que apenas se estructuran en torno al cuerpo. Un ir y venir de líneas fluídas que se ajustan al cuerpo con la ayuda de drapeados, broches de pedrería y sencillos fruncidos.
Es importante resaltar los looks cincuenteros de las modelos con moños altos e italianos; un marco perfecto para las novias del 2012. No debemos obviar el gran protagonismo que cobraron las plumas sobre escotes y cuerpos encorsetados, los tocados-máscara elaborados en encaje y la presencia constante de velos cortos, que daban un aire «retro» y muy chic.
Aquí tenéis una muestra de lo que se pudo ver como colofón a «La nuit blanche»: